Pantalla táctil 3.5 pulgadas

Hoy vamos a ver como utilizar una pantalla táctil con la Raspberry Pi. Hemos utilizado una pantalla táctil de 3,5 pulgadas, que viene con un puerto de 26 pines muy sencillo de conectar a la Raspberry Pi.
Para ello simplemente debemos colocarlo de la siguiente manera:
A continuación enchufamos el ratón, el teclado, el hdmi con un monitor, el cable de internet (o bien tener habilitado y configurado el wifi) y por último la alimentación de la Raspberry Pi.
Una vez inicie, simplemente debemos instalar el driver correspondiente ejecutando lo siguiente:
sudo rm -rf LCD-show
git clone https://github.com/goodtft/LCD-show.git
chmod -R 755 LCD-show
cd LCD-show/
sudo ./LCD35-show
Esto reiniciará la Raspberry pi, y una vez vuelva a arrancar, acabará mostrando la imagen en la pantalla, y dejará de hacerlo en el monitor.
Si queremos volver a mostrar la imagen por el monitor, simplemente debemos hacer lo siguiente:
cd LCD-show/
sudo ./LCD-hdmi
Y la rpi se reiniciará, y volverá a mostrarse desde el monitor.
Cada vez que queramos cambiar de una a otra, ahora que está instalado el driver y tenemos permisos sobre la carpeta bastará con hacer esto:
cd LCD-show/
Si queremos utilizar el monitor hdmi, ejecutar:
sudo ./LCD-hdmi
O si queremos utilizar la pantalla táctil:
sudo ./LCD35-show
Además el driver, nos permite utilizar pantallas del mismo modelo pero distinto tamaño como pueden ser cualquiera de las siguientes:
2.4" 2.8"3.2" 3.5" 5.0" 7.0"
Y sirve para las siguientes Raspberry:
3B+/A/A+/B/B+/PI2/ PI3/ZERO/ZERO W
Por último, si queremos utilizar la pantalla de manera más portátil, podremos usar un cargador como el siguiente:
Debe tener salida de 5V, y de al menos 1000 mA.
Ahora sólo nos falta, poder utilizar algún teclado virtual, para lo que debemos ejecutar el siguiente comando:
sudo apt-get install matchbox-keyboard
Para acceder a él, desplegamos el menú, seleccionamos “Accesories” y después “Keyboard”.
De esta forma, y configurando el wifi a la Raspberry Pi, podemos usarlo en cualquier parte de la casa, o incluso fuera si usamos nuestro móvil como emisor de wifi.